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Recital de Diego Torres en el Coloso
La lepra se floreó en el Coloso y aplastó futbolísticamente a Tigre. Sí, el mismo Tigre que venciera en canchas enmarañadas como la Bombonera y el Nuevo Gasómetro.
Lo cierto es que aquel matador poco se lució en Rosario. En realidad, nunca pudo jugar al fútbol.
Newells lo presionó, le quitó muy rápidamente el balón, y a partir del dinamismo de sus jugadores, argumentó un sólido triunfo. Fue 2 a 0, pero créame que debió haber sido más voluminoso.
Los tantos llegaron en el primer tiempo a través de Diego Torres y Vangioni, goleadores de un equipo que confirmó su candidatura al titulo.


Como en las viejas épocas
Lanus fue claramente superior a Argentinos Juniors, y pudo plasmarlo en el tanteador ya que lo demolió 4 a 2.
Sin embargo, la falta de precisión y contundencia en los metros finales, trajeron al escenario del Sur un extra de incertidumbre y sorpresa que no merecía.
El primer tiempo fue entretenido, con muchos goles. Salvio, reemplazante de Valeri, ponía el 1 a 0, pero luego empataría el buitre Pavlovich para el bicho. De todas formas, la alegría para la visita fue efímera, porque Sand y otra vez Salvio adelantarían 3 a 1 a los dirigidos por Zubeldia. Argentinos conseguiría, pocos minutos después el descuento por parte de Pavlovich, que transita por una buena racha goleadora
El complemento, como todo el partido, favorecería a Lanus, que no podía terminar de cerrar el pleito. Finalmente Sand, de penal, hallaría el 4 a 2 final. Justo y meritorio.